A mediados de 2010 el Gobierno de la República de Francia, encabezado por su presidente Nicolas Sarkozy, expulsó cientos de personas del pueblo Romaní, mejor conocidos como Gitanos, hacia sus países de orígenes como Bulgaria y Rumania.
En esa oportunidad la cantante colombiana Shakira le dijo a Sarkozy: “Todos somos gitanos”.
En septiembre de este año (2011), a pesar de las múltiples protestas en toda Europa y el mundo, el Gobierno de Sarkozy nuevamente toma medidas despóticas y fascistas, y desaloja el campamento Saint-Denis, al norte de Paris, y deporta del país en un ferrocarril especial a cientos de cíngaros, separando a los adultos de los niños, que según la prensa francesa, recuerdan las deportaciones durante el holocausto Nazi en contra de este pueblo.
Cada año a finales de mayo, miles de gitanos viajan hacia Francia desde toda Europa para el peregrinaje a la localidad de Saintes Maries de la Mer y así rendir homenaje a la santa negra: Santa Sara la Cali.
Desde Venezuela elevamos una plegaria a Santa Sara la Cali ante esta nueva ofensiva racista y xenofóbica en contra del pueblo Gitano de Francia.
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