jueves, 6 de diciembre de 2007

Sigo pensando en la violencia

Cuando mi Nova se enferma algo en mi comienza a funcionar diferente. No sé si es el instinto materno que se activa o el miedo al hecho mismo de que ella esté enferma. Lo cierto es que he perdido el sueño en las noches, durante estos días que hemos estado de reposo médico en casa.

Esta mañana, alguien me reclamaba lo dura que a veces puedo ser en el trato con mi Nova, a pesar de lo dulce que es ella. Tal vez para mi es sencillamente disciplina y es “la forma” como aprendí a impartirla. Pero gracias por la observación.

Ese importante comentario, aunado a las tres noches que llevo sin dormir cuidando que mi niña no se ahogue con la tos y el encierro al cual no estoy acostumbrada, me hicieron recordar lo que dije en el trabajo: “En Chichiriviche”:

“Nova es, definitivamente, un milagro que llegó para cambiar mi vida y a la vez, es una evidencia de la existencia de Dios”.

Pensé también qué hubiese sido de mí sin el valiosísimo apoyo de mis primas, dos chamas arrechísimas y sinceras: Joselaing y La Negra, en uno de los momentos más difíciles: recoger la mudanza, abandonar mi hogar para comenzar de nuevo y tener que volver al nomadismo.

Esto me recordó el trabajo anterior: “Otro esfuerzo por una vida libre de violencia”, lo cual me hace reconfirmar que todo en la vida se conecta.

Creo que lo entendí, que la violencia nace ahí, en ese momento mínimo, insignificante, pequeño, cuando le damos algo de fuerza, tanto al tono de voz, al lenguaje corporal y la intención con que le hablamos al ser que supuestamente amamos.

Erradicar la violencia de mi vida tiene que ser un ejercicio diario desde que me paro de la cama cada día. Tener una actitud de optimismo.

Debemos amarnos primero a nosotros mismos, y eso comienza con el cuidado de nuestra salud. En base a mi experiencia aseguro que la violencia la manifestamos primero en contra de nuestro propio cuerpo.

Creo que es un estado mental de insatisfacción y de frustración que proyectamos hacia los seres que tenemos alrededor.

Para poder trabajar el tema de la violencia, insisto, debo primero reconocer mis propias actitudes violentas… y en eso ando.

Por amor a mi Nova me encuentro en un proceso de transformación y revisión profundas, que se inició con su gestación.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

No temas, eres un ser racional y sabes distinguir entre violencia y disciplina. Además nadie es quien para opinar en la crianza de tu hija, tu lo has dicho, es tu proceso desde la gestacíón.
Tambien como ser racional, debes pensar en aquellos países, donde las leyes protegen a los niños tanto, que son incapaces de protegerlos de ellos mismos, al ver que estan amparados, se sienten invencibles y se descarrilan, y simplemente terminas criando delincuentes, donde el único castigo que se les da es tras las rejas.
Así que no tengas miedo, tu sabras diferenciar, ya eres madre, ya eres sabia.
Te quiero prima

Anaiz Quevedo dijo...

Tengo que sorprenderme nuevamente de la conexión que tenemos. No había leído tu nuevo posteo. Estaba inspirada y escribí el mío y hay ideas similares.

Por otro lado hay varias ideas en tu escrito claves:
La Crianza de los hijos no es fácil
Buscar la tranquilidad en nosotros primero para entender a nuestros niños, que tienen una forma rápida (a veces agotadora de entender al mundo)
Diferenciar como dice tu prima entre disciplina y violencia, las madres en franca conexión, sabemos como hacerlo... ahora si andamos sin paz, intranquilas... es eso lo que reflejamos hasta en nuerstra salud... Ojo pero siempre nos levantamos.
A veces no ando muy de santa, cometo errores y entre tanta armonía, renacimiento y meditación, también pierdo la paciencia cuando veo que mi hijo se pone muy malcriado. No sé si una nalgadita es una forma de violencia cuando un cariño por favor no funciona.
En todo caso poner correctivos desde la infancia es un asunto delicado, pero de que hay quer ponerlos hay que ponerlos como dice tu prima con sabiduría.
Y tu eres sabia Eli, lo que hay que procurarnos es paz y tranquilidad, contar 1,2,3...
Besos

Eliana Q dijo...

Gracias a la Negra y Anaiz por sus palabras, de verdad que educar un chamo no es fácil...
Por Dios, eso de que soy "sabia" me quda muy grande, jajaajjajjaja
Eliana Quintero

Eliana Q dijo...

Les invito a leer lo último en el blog Anita:
"Ama a tu prójimo como a ti mismo(a), no más que a ti mismo(a)"
http://anaizquevedo.blogspot.com/

Es impresionante las concidencias que tenemos las dos y lo conectadas que estamos...

Eliana